El entrenador de Regatas Resistencia analizó lo que fue el regreso del remero a los torneos nacionales, realizó un balance desde lo deportivo e institucional y su primera temporada completa como entrenador.
Pasados 7 años de su última participación Regatas Resistencia tuvo el ansiado regreso a las competencias nacionales. Con otras prioridades, con otros objetivos, con diferentes miradas con respecto al futuro. Plagado de jóvenes, con un plantel con promedio de edad por debajo de los 22 años.
En ese contexto pasó la última temporada para el remero, quien finalizó su participación en la División NEA y a pesar de no lograr la clasificación terminó dando un salto de calidad en toda la estructura del básquet rojo.
La palabra autorizada para explicar el momento de Regatas es Juan Vargas quien, a pesar de su juventud, fue el encargado de encabezar el proyecto desde la dirección técnica. El entrenador remero comenzó realizando un balance general del pasado Torneo Federal: “Considero que la temporada fue muy positiva. Partiendo desde donde era nuestro objetivo y el de la institución que era trabajar para desarrollar a jóvenes deportistas del club y brindarles a este grupo de chicos de formativa la posibilidad de inserción a un torneo profesional. En ese aspecto se sumó bastante, porque los chicos tuvieron un rol muy importante dentro del equipo, cumplieron con ese papel y cumplieron con las expectativas que yo tenía”.
Con respecto a la importancia de poder ser parte de un campeonato profesional, Vargas explica: “el Torneo Federal jerarquiza la estructura del básquet del club en muchos aspecto: desde la forma de trabajo que te presenta este tipo de competencia, como también se ve reflejado en las categorías formativas que cada vez te demuestran más ganas y les despierta una motivación en una cantidad de chicos que tienen un espejo para trabajar día a día y cumplir esa meta de llegar a primera división y estar dentro de un plantel profesional. A nivel infraestructura te exige crecer y estar cada vez en mejores condiciones para que el trabajo sea aún más cómodo. Nuestra realidad es que Regatas tiene una estructura de trabajo que le brinda mucha calidad al equipo. Y por último, a nivel dirigencial, donde cada dirigente trabaja en busca de recursos económicos que permitan un equilibrio estable en el básquet para ir creciendo año a año, ya sea con objetivos deportivos o infraestructura”.
Hablando de lo estrictamente deportivo, el entrenador se mostró conforme con la temporada de su equipo: “Hay muchas cosas buenas de la temporada, pero lo realmente positivo es el cambio de hábito de los chicos, la forma en la que trabajaron, la forma en la que se tomaron su rol importante con algunos que no tuvieron siquiera una experiencia en el provincial de mayores y se encontraron con esto que fue muy bueno para el desarrollo. Y considero que lo hicieron muy bien, estuvieron a la altura. Sabiendo que tienen cosas por mejorar, destaco las ganas que tienen de seguir trabajando para cumplir el objetivo de seguir dedicándose a esto”.
“En cuanto a lo colectivo, mejoraría el hecho de tener baches de desconcentraciones, que realmente fue algo que lo sufrimos mucho este torneo, donde nos encontramos con equipos que castigaban eso. Buscaría tener mucha regularidad sin importar el rival que te toque. El equipo fue muy competitivo todo el torneo, siendo que hasta las últimas fechas teníamos posibilidades de clasificación y estando en esa situación ya habíamos cumplido nuestro objetivo. Estábamos en un lugar que realmente nos sentíamos cómodo, pero hubo detalles que por falta de experiencia nos hicieron cerrar mal algunos juegos que nos costaron la clasificación. Pero me deja tranquilo saber que el equipo estuvo a la altura de la competencia y tener muchas más cosas positivas que negativas en una temporada tan pareja. No me preocupa la posición final, fue una temporada pareja que podía clasificar cualquiera y jugamos de igual a igual con todos. Sabemos que uno cuando habla de desarrollo el resultado es una situación secundaria, pero nosotros queríamos entrar a competir y teníamos nuestro objetivo colectivo que era clasificar a playoffs y aunque no se dio me deja muy tranquilo saber que el equipo dio todo su esfuerzo. Se cumplieron los otros objetivos que se propuso y eso nos deja mucho más tranquilo”.
Por último, Vargas habló de su futuro y del de la institución: “de darse mi continuidad para que siga llevando el proyecto adelante, lo haría buscando a esos chicos que aprovecharon esta oportunidad y dieron una muestra en el salto de calidad de su desarrollo. Buscaría la forma de seguir potenciando eso. Empezar a sumar objetivos, tratar de generar una estructura más sólida, ya sea en Primera División y también en formativas porque es la que nos provee esa calidad de chicos que puedan cubrir un lugar. Creo en el trabajo a largo plazo, no quisiera que los resultados sean tan rápidos y eso se pierda en el tiempo. Prefiero sostener a Regatas donde se sienta competitivo y eso te haga crecer como institución. No tengo como objetivo que Regatas este en lugares que sean nocivos para la infraestructura de la formativa, sino que ir acompañando el resultado del desarrollo de manera paralela y que se mantenga en el tiempo en este torneo tan importante”.
Textos: Juan Cruz Carrasco (prensa Regatas Resistencia)
Fotos: Gentileza Fernando Lara
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